La señorita Beatriz es más cursi que collar de perlas.
Cursi como guante de terciopelo. De joven fue enfermera dedicada.
En la Clínica de Maternidad y Afines, Beatriz se especializó en afeitar pubis angelicales.
Es soltera. Solterita. Solterona. Pero conoce mucha concha y mucho pene.
Ya retirada y loca ( según diagnostico del barrio) camina y canta. Camina por los cordones de las veredas, todas las tardes de cinco a seis:
Con espuma de lavar
lavar,
lavar;
con jaboncito de azahares,
fina pluma, suave bello,
y a cortar,
cortar,
cortar... .
Vive en una casa con gatos en la ventana y un cartel en la puerta que dice: Se hacen pubis a domicilio.
* En Minúsculas. Ediciones Orillera. 2010.